ESA NOCHE DE VERANO
Alejandra y Lucas crecen juntos en Madrid y son los mejores amigos cuando tienen diez años. Una noche de verano, tras encontrar un cohete mientras juegan al escondite, deciden subir a la cima de un cerro y hacerlo estallar desde allí.
Esa noche, poco después de ver su primera lluvia de estrellas, ven un espantoso accidente de tráfico.
Quince días después, Alejandra le cuenta a Lucas que se marcha a Nueva York porque su padre ha encontrado un trabajo mejor allí. Alejandra le promete que seguirán en contacto pero esto, con el paso del tiempo y la adolescencia de por medio, nunca sucede.
Veinte años después, cuando a Lucas le contratan para ir a trabajar a Londres, los dos, para su sorpresa, vuelven a encontrarse. Pero, después de tanto tiempo, tendrán que volver a conocerse el uno al otro.
Pasados seis meses de trabajo Lucas tiene que volver a Madrid. Alejandra, que tiene su propia empresa en Londres y vive allí desde que terminó la universidad, tendrá que ver cómo Lucas se aleja de nuevo de su vida. Esta vez, es él el que se marcha y no ella. Aunque el destino les guarda una sorpresa...
¿Se repetirá de nuevo la historia?
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JACK EL ASESINO
Relato corto sobre la vuelta a la actividad de Jack el asesino.
Hola me llamo Jack y soy un asesino. No soy Jack el destripador. Soy simplemente Jack. Jack el asesino. Así me conocían cuando, durante una época, mis asesinatos ocuparon todas y cada una de las portadas en la prensa. Cuando la policía, la Interpol, y cualquier otra entidad que vigile y se preocupe por la seguridad de los ciudadanos, me buscaba.
Llegué a ser el hombre más buscado. Aquel al que todos temían y el que, casi todas las semanas, salía en la prensa porque había cometido un nuevo asesinato. Nunca lograron atraparme, y por eso me hice famoso.
Al principio asesinaba por placer. Después alquilé mis servicios al mejor postor. Solo había una regla: yo decidía cómo finalizaría el trabajo.
Después, pasados diez años, me retiré. Siempre pensé que era mejor pasar a ser leyenda. Cometí más de trescientos asesinatos, y dejé mi firma en todos ellos. Firmaba todos y cada uno mis trabajos. Ya fuera con una nota, marcándolo a fuego, o con un cuchillo sobre la piel de mis víctimas. Fuera como fuese, cuando encontraban el cadáver siempre iba acompañado de la misma frase: “saludos de Jack el asesino”.
He decidido volver a la primera línea y revolucionar de nuevo las portadas de los periódicos e incendiar la red de las redes.
Solo hay un problema. Que ya no tengo inspiración. Ya no hay ninguna forma de matar que me llame la atención. Sin embargo, no puedo evitar volver.
De manera que hace unos días decidí utilizar la red, utilizar este blog y alquilar mis servicios desde aquí. No tienes que pagarme, lo hago por amor al arte.
París es una fiesta
El relato trata de recoger los últimos días de la vida de Hemingway, su tumultuosa relación con Fitzgerald, y todo ello adornado con el París de los años veinte y su novela autobiográfica que da título a este relato: París es una fiesta.
«París es una fiesta»
Durante los últimos días Ernest Hemingway ha estado teniendo la misma pesadilla una y otra vez. Se despierta sudando y se alegra de no estar de vuelta en aquel París de los años veinte.
Uno de esos días, después de despertarse sobresaltado por el mismo tipo de sueño, decide levantarse de la cama, bajar a la cocina para prepararse un café y continuar con su nueva novela. Lo que no imagina es lo que se va a encontrar esa mañana.